Tos ferina

La tos ferina puede comenzar como un resfriado común que evoluciona hasta convertirse en una tos que dura semanas o meses.

El desarrollo de la investigación médica ha permitido que las enfermedades que antes eran emergencias sanitarias a nivel mundial, hoy sean de una gravedad menor. La aplicación de vacunas ha cambiado el panorama de la salud.

Hace unas décadas, la tos ferina afectaba a toda la infancia; ahora se ha observado su aparición en quienes no poseen el esquema completo de vacunación o en adolescentes y adultos que perdieron la inmunidad. Tan solo en Estados Unidos se llegó a reportar la muerte de 9 mil personas al año por esta causa; sin embargo la vacuna redujo la cifra a 20 en la actualidad (KidsHealth,2016)

La tos ferina, también conocida como pertussis, es una infección del sistema respiratorio sumamente contagiosa. Causa fuertes ataques de tos rápida, violenta e incontrolable que a veces terminan con un silbido al inhalar, obtuvo su nombre por este sonido de “fiera” que hacen los enfermos cuando se recuperan después de un ataque.

Al inicio suele confundirse con un resfriado común, pero los síntomas pueden evolucionar después de 7 o 14 días e incluso permanecer por 10 semanas. Por lo general, la infección se muestra más ligera en adolescentes y adultos, mientras que en bebés y niños aparece más intensamente.

¿Por qué se produce la tos ferina?

Es causada por un tipo de bacteria que solo ataca a los humanos, llamada Bordetella Pertussis. Ésta se adhiere al aparato respiratorio superior y libera toxinas que provocan inflamación.

Se transmite vía aérea, así que cuando una persona infectada estornuda, tose o habla, libera partículas que pueden aspirar otras personas y alojarse en sus pulmones. Esto sucede con más facilidad durante las primeras etapas hasta aproximadamente 2 semanas después del inicio de la tos.

El principal factor de riesgo es la falta de vacunación; los bebés menores de 12 meses que no están vacunados tienen mayor riesgo de complicaciones graves y muerte.

Desde el 2014, se ha reportado un mayor número de incidencia de la enfermedad, esto en consecuencia a la decisión de muchos padres de dejar de vacunar a sus hijos y a la disminución de inmunidad de quienes sí obtuvieron la dosis.

¿Qué puede salir mal?

Cuando se trata de adultos, la tos ferina por lo general aparece sin representar un problema de gravedad para la salud. Las complicaciones más intensas se relacionan a los efectos secundarios de la tos constante, como costillas fisuradas, hernias abdominales o vasos sanguíneos rotos en la piel.

Sin embargo, en el caso de bebés, especialmente en los menores de 6 meses, las consecuencias pueden ser letales. Aproximadamente un tercio de los niños menores de 1 año que contraen la tos ferina necesitan atención médica en un hospital y  1 de cada 100 que reciben este tratamiento muere (Centro para el control y la prevención de enfermedades, 2022).

Algunas de las complicaciones graves en infantes son:

• Neumonía
• Respiración lenta o apnea
• Deshidratación o desnutrición
• Convulsiones
• Daño cerebral

¿Cuáles son las medidas para prevenir la tos ferina?

La manera más adecuada para protegerse de la tos ferina es mediante la vacuna DTPa (difteria, tétanos, y tos ferina acelular), esta se administra en cinco dosis desde los 2 meses hasta los 6 años de edad. Para aumentar la protección, se recomienda que entre los 11 y 18 años se reciba una dosis de refuerzo.

Además, los médicos reportan la necesidad de que las mujeres embarazadas reciban la vacuna entre las semanas 27 y 36 de gestación, pues existe posibilidad de brindar protección al bebé durante los primeros meses.

Al tratarse de una enfermedad contagiosa por medio aéreo, es importante tener cuidado en la higiene y contacto con personas que pudieran estar enfermas, así como acudir a un médico si se sospecha de riesgo.

Si tienes algunas dudas, es aconsejable consultar nuestro directorio y solicitar una cita con especialistas para orientarte.

Consulte a su médico. Los artículos del blog «Salud de Hierro» no constituyen orientación médica ni deben ser utilizados con fines diagnósticos o terapéutico

REFERENCIAS

• Mayo Clinic. Tos Ferina. [Internet] Bethesda, Estados Unidos. 11 de febrero de 2022 (consultado el 18 de noviembre de 2022). Recuperado de: https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/whooping-cough/symptoms-causes/syc-20378973
• Centro para el control y la prevención de enfermedades. Tosferina [Internet] Washington, Estados Unidos. 4 de agosto de 2022 (consultado el 18 de noviembre  de 2022). Recuperado de: https://www.cdc.gov/pertussis/index-sp.html
• Manual MSD. Tos ferina [Internet] NJ,, Estados Unidos. Abril de 2022 (consultado el 18 de noviembre de 2022). Recuperado de: https://www.msdmanuals.com/es/professional/enfermedades-infecciosas/bacilos-gramnegativos/tos-ferina
• Tos ferina. [Internet] Delaware, Estados Unidos. Febrero de 2016 (consultado el 18 de noviembre de 2022). Recuperado de: https://kidshealth.org/es/parents/whooping-cough.html